Los hombres sufrimos, desgraciadamente, un declive en nuestras capacidades según cumplimos años. Y, generalmente, pasada la frontera de los 40, nos empezamos a notar “cosas”, ¿qué “cosas”?
Pérdida de energía, menor seguridad de carácter, síntomas de ansiedad y bajo ánimo, menor capacidad de concentración, más dificultad para ganar músculo, peor recuperación tras el ejercicio, pérdida de fuerza, un declive en nuestras capacidades sexuales, acúmulo de grasa en la zona abdominal (“echamos tripita”)…
Dr. Alfonso Galán González – Equipo Médico Neolife
¿Ha leído algo con lo que se sienta identificado?
Pues bueno, todo estos síntomas -y bastantes más-, están asociados a la pérdida de nuestra preciada hormona Testosterona. En un proceso que se llama Hipogonadismo Masculino, también conocido como Andropausia.
Devolver nuestros niveles de Testosterona a aquellos que teníamos antes de que esto ocurriera, los niveles que teníamos de joven, usando exactamente la misma molécula, esto es, Testosterona Bioidéntica -del todo indistinguible, a nivel molecular, de la que producimos de forma endógena- corrige todos estos problemas y muchos más. Cosas que no vemos, pero que están ocurriendo también. Nuestras arterias acumulan placa llevando a aterosclerosis y aumenta nuestro riesgo de sufrir un infarto de miocardio o un ictus, se perjudican nuestro perfil del azúcar, nuestro perfil lipídico, acumulamos grasa visceral, etc… Todo esto, lleva inevitablemente a deterioro y enfermedad.
Seguridad del tratamiento
No ignoremos al elefante en la habitación. Somos conscientes de los clichés y falsas creencias que rodean al uso de Testosterona.
La testosterona ha sido víctima de extrapolaciones imposibles desde los andrógenos de síntesis que se utilizan como fármacos para aumentar el rendimiento en el mundo del deporte y del fisioculturismo. Y se le han atribuido efectos negativos como un aumento del riesgo de cáncer de próstata y aumento de riesgo cardiovascular. Estas acusaciones son absolutamente refutadas por la evidencia científica disponible. El British Journal of Urology publicó que no está relacionado ni con cáncer de próstata ni con elevaciones del PSA, asimismo, la evidencia actual indica que son precisamente valores bajos de Testosterona los que se asocian a cánceres de próstata más agresivos. En cuanto al Riesgo Cardiovascular, sólo diremos que se está incluyendo el hipogonadismo (bajos niveles de testosterona) como un nuevo y no reconocido, hasta ahora, factor de riesgo cardiovascular, pues bajos niveles de Testosterona se asocian a síndrome metabólico, diabetes, dislipemia, inflamación y mortalidad en general, y su suplementación, como indica una publicación del European Journal of Endocrinology, lleva a mejorías de perfil glucémico, lipídico, disminución de grasa visceral y del riesgo cardiovascular en general.
Por tanto, lo que proponemos es ayudarle, de forma fisiológica, natural, sencilla, a recuperar aquello que su cuerpo está perdiendo, y que desgraciadamente, está causando estragos en sus sistemas.
El uso de implantes hormonales de Testosterona subcutáneos en forma de pellets es una forma muy cómoda y eficaz de devolver sus niveles de Testosterona a donde deberían estar. Conseguimos niveles buenos, estables y mantenidos en el tiempo (aproximadamente unos 5 meses).
Queremos que se queden con la idea de que el envejecimiento NO es un proceso de pérdida funcional y declive inalterable. La disminución de los niveles de muchas de nuestras hormonas a lo largo de la vida se relaciona con este proceso de envejecimiento y su reposición de manera controlada y correctamente prescrita retrasa la pérdida funcional y el declive general asociado al paso del tiempo.
En Neolife llevamos casi 10 años en nuestras clínicas de Madrid y Marbella cuidando la salud de nuestros pacientes, tenemos la máxima formación en optimización hormonal y la experiencia de miles de tratamientos y pacientes satisfechos a nuestras espaldas.
Estaremos encantados de discutir con usted su caso en particular, circunstancias y dudas.