El escritor y cliente de Neolife realiza varias menciones de la clínica en su último libro: “Shangri-La, El Elixir de la Eterna Juventud”.
Sánchez Dragó describe cómo la salud se fundamenta en la genética, los estilos de vida y en el carácter, pero se requiere voluntad y a la vez flexibilidad en el camino para alcanzar la eterna juventud. Voluntad para hacer lo que se considera correcto y flexibilidad para cambiar de opinión, contradecirse o transgredir la norma cuando sea preciso.
Dirección médica de Neolife
Fernando Sánchez Dragó presentó su libro en Sevilla, dónde acudió también representación de la clínica Neolife.
Coincidiendo en fechas próximas con su 80 cumpleaños (2 de octubre de 2016), el famoso novelista, ensayista y periodista, Fernando Sánchez Dragó, presentó en Sevilla el pasado 29 de septiembre su último libro “Shangri-La, el elixir de la eterna juventud”.
Como era de esperar la presentación fue todo un éxito. El autor esgrimió cómo su deseo de infancia de ser un escritor-aventurero llevaba de forma implícita la necesidad de gozar de una buena salud. Para ello Sánchez Dragó buscó desde muy joven su propio elixir de la eterna juventud, entendiendo como elixir aquellas medidas que en su libertad personal de decisión consideró y considera adecuadas para mantener su salud y vitalidad.
Fernando Sánchez Dragó es un autor polémico, transgresor y provocador, a nadie se le escapa. Él mismo lo reconoce, y en el ámbito de la salud no lo es menos. No es amigo de las normas y los consejos para todos, tan habituales en medicina, y reivindica cualquier remedio, ya sea de la medicina tradicional china como de la más vanguardista medicina occidental, que le pudiera ser a él útil. “Todos los individuos somos diferentes” dice, algo que se ajusta a la cuarta “P” de nuestra Medicina Preventiva, Proactiva, Predictiva y Personalizada. Su libro no pretende ser un manual de autoayuda -cosa que detesta-, no pretende convencer ni explicar a nadie lo que cada uno deba hacer con su salud, tan solo narra lo que a él le ha ido bien para llegar con esa admirable vitalidad a la edad de 80 años. “De eso se trata, de permanecer siempre joven todos los años que vivas”.
Fernando es uno de los clientes de Neolife. No lo oculta, como queda claramente escrito en su libro (aparece en 13 páginas diferentes, entre la 181 y la 360). También mencionó en varias ocasiones a la clínica Neolife en la presentación de su libro “Shangri-La El Elixir de la Eterna Juventud”.
Su sentido común, su humor, su libertad de pensamiento y su sabiduría le hacen un paciente especial: es un paciente maestro. De todos los pacientes se aprende, pero en este caso se aprende más. No es de extrañar, el objetivo de la medicina que practicamos en Neolife es precisamente llegar a los 80 años, y si es posible a los 100, con la vitalidad de Fernando. Si bien, como médico, no comparto algunas de sus decisiones sobre ciertos hábitos o remedios que utiliza, respeto su libertad individual y le informo de las bases científicas de mi consejo. Él mismo describe cómo la salud se fundamenta en la genética, los estilos de vida y en el carácter, pero se requiere voluntad y a la vez flexibilidad en el camino para alcanzar la eterna juventud. Voluntad para hacer lo que se considera correcto y flexibilidad para cambiar de opinión, contradecirse o transgredir la norma cuando sea preciso. Fernando no tiene ningún inconveniente en reconocer que “de vez en cuando me atizo un chuletón de medio kilo, y tan contento”.
Sánchez Dragó intervino también en el XV congreso de la Sociedad Española de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad.
Dos días después de la presentación de su libro y un día antes de su cumpleaños, Dragó clausuró, también en Sevilla, el XV congreso de la SEMAL. Su intervención volvió a ser un éxito en un foro de médicos especialistas en procurar que nuestros pacientes envejezcan tan saludablemente como él. Así lo reconoció el Prof. Manuel Castillo en el acto de clausura: Dragó es una persona de la que los médicos podemos aprender mucho. Fernando definió la medicina antienvejecimiento como una mezcla de ciencia, conciencia y arte, algo que comparto plenamente. Recibió un largo y caluroso aplauso.