La testosterona es una hormona pleiotrópica, es decir, que tiene múltiples funciones y a diferentes niveles. No solo actúa de una forma neuroactiva, modificando comportamientos humanos como la agresividad y la actividad sexual, sino que estimula la neuroplasticidad, incrementando la supervivencia neuronal, lo que le confiere la capacidad necesaria para mejorar los síntomas depresivos.
En una revisión sistemática de 27 publicaciones en la que se incluyeron aproximadamente a 1.900 varones, se comprobó que el tratamiento con testosterona duplicaba la posibilidad de mejorar los síntomas depresivos frente al placebo. De hecho, a mayor dosis de testosterona mayor efecto antidepresivo se producía.
Dr. Moisés De Vicente – Equipo Médico Neolife
La suplementación con hormonas bioidénticas es el presente.
El envejecimiento nos acecha. A partir de los 40 años, aproximadamente, nuestras células comienzan una cuesta abajo metabólica tras haber logrado su plenitud. Parece que ya nada funciona igual, tenemos menos vitalidad y las enfermedades típicas de esta situación comienzan a merodearnos, a dar sus primeros mordiscos que no son sino el preámbulo de lo que ocurrirá en las siguientes dos décadas.
Con el fin de paliar esta situación e intentar revertir o, al menos, posponer la aparición de estas enfermedades, en Neolife creemos firmemente en situar nuestros biomarcadores en la excelencia. Esto incluye biomarcadores relacionados con el riesgo cardiovascular, biomarcadores del metabolismo óseo y biomarcadores hormonales.
La suplementación con hormonas bioidénticas es el presente. Nos permite volver a una situación hormonal ya perdida y salir de la decadencia en la que estamos inmersos. Volver a sentir y experimentar cosas que habíamos olvidado.
Desde nuestro punto de vista, esta suplementación es necesaria para completar el programa de prevención de enfermedades. Disminuiremos el riesgo cardiovascular, evitaremos la aparición de osteoporosis, mejoraremos nuestra vitalidad, nuestra masa muscular y un largo etcétera de beneficios.
La testosterona es una hormona pleiotrópica. Esto significa que tiene múltiples funciones y a diferentes niveles. No solo actúa de una forma neuroactiva, modificando ciertas áreas del comportamiento humano como la agresividad y la actividad sexual. Además, estimula la neuroplasticidad, incrementando la supervivencia neuronal, lo que le confiere la capacidad necesaria para mejorar los síntomas depresivos.
El cómo actúa la testosterona a este nivel es algo que está muy de actualidad. En un estudio que se publicará próximamente (1) identifican al neurotransmisor GABA como la clave para que se produzca este efecto. Esta molécula interviene en la fisiopatología de múltiples desórdenes psiquiátricos. Parece que existe una relación entre los niveles de GABA y los de testosterona en los pacientes con síntomas depresivos.
Es cierto que, hasta ahora, en los diferentes estudios realizados para confirmar si la administración de testosterona es capaz de mejorar estos síntomas, los resultados no eran lo suficientemente categóricos. Esto se debía principalmente a la enorme cantidad de factores de confusión asociados. Por ello, se acaba de publicar un artículo en la revista JAMA Psychiatry (2) que nos permite añadir un foco de luz a este tema y ampliar con otro beneficio más el uso de testosterona.
Se trata de una revisión sistemática de 27 publicaciones, con lo que se incluyeron aproximadamente a 1.900 varones. Se comprobó que el tratamiento con testosterona duplicaba la posibilidad de mejorar los síntomas depresivos frente al placebo. De hecho, a mayor dosis de testosterona mayor efecto antidepresivo se producía.
Para el análisis se procedió a evaluar el estado de ánimo y la posible presencia de síntomas depresivos en los pacientes, utilizando test validados, como el Beck Depression Inventory Score (BDI), antes y después de haberles administrado testosterona o placebo. Efectivamente, los pacientes a los que se administró la testosterona mejoraron de forma significativa e independiente del resto de factores (edad, sexo, etc.) los síntomas depresivos. De hecho, esto se trasladó a una mejora en la puntuación del BDI de hasta 2,2 puntos, similar a la eficacia de algunas terapias para la depresión. Es cierto que no se trata de un ensayo clínico aleatorizado, pero dentro de la literatura publicada al respecto es probablemente uno de los estudios con mayor evidencia científica.
¿Significa esto que la testosterona es, o será, un tratamiento para la depresión? La respuesta es no, al menos no de forma única. La depresión mayor guarda una serie de características, genéticas y fisiopatológicas, que van más allá de un tratamiento de reemplazo hormonal. Es necesario una adecuada valoración por un especialista y un tratamiento antidepresivo correcto, acorde con las guías de práctica clínica en curso.
Ahora bien, es posible que exista un nicho de pacientes en los que la falta de testosterona produzca síntomas de falta de vitalidad y distimia (tendencia al ánimo depresivo) que pudieran catalogarse como depresión leve, sin llegar a serlo. Ya se ha publicado un estudio donde se confirma que estos pacientes, tratados con terapia hormonal basada en testosterona, logran una mejoría significativa de la sintomatología con lo que son capaces de retomar su vida de forma plena (3).
En Neolife, dentro de nuestro enfoque global con respecto al antienvejecimiento, creeremos que el tratamiento con testosterona, en casos seleccionados y teniendo en cuenta múltiples variables, aporta unos beneficios extraordinarios, incluyendo la mejora del ánimo y la situación emocional.
BIBLIOGRAFÍA
(1) Flores Ramos; S. Alcauter; M. López-Titla et al. Testosterone is related to GABA+ levels in the posterior-cingulate in unmedicated depressed women during reproductive life. Journal of Affective Disorders. Volume 242, 1 January 2019, Pages 143-14.
(2) Andreas Walther; Jonas Breidenstein; Robert Miller. Association of Testosterone Treatment With Alleviation of Depressive Symptoms in Men. A Systematic Review and Meta-analysis. JAMA Psychiatry. Published online November 14, 2018. doi:10.1001/jamapsychiatry.2018.2734.
(3) Vartolomei MD, Kimura, Vartolomei, Shariat. Systematic Review of the Impact of Testosterone Replacement Therapy on Depression in Patients with Late-onset Testosterone Deficiency. Eur Urol Focus. 2018 Jul 14. pii: S2405-4569(18)30172-X. doi: 10.1016/j.euf.2018.07.006. [Epub ahead of print].