El comienzo de cada año supone un buen momento para plantearnos nuevos objetivos saludables, realistas y alcanzables. Dejar de fumar, consumir alimentos que nos ayuden a preservar nuestra salud, comenzar un nuevo deporte o retomar la actividad física, consumir menos alcohol…

Según la Sociedad Española de Cardiología, las enfermedades cardiovasculares suponen la primera causa de muerte en España. Recientes estudios publicados muestran que las personas que adquieren o tienen unos hábitos de vida saludables, pueden vivir hasta siete años o más respecto a la población general.  En definitiva, es posible pasar la última parte de estos años adicionales con una mayor y mejor calidad de vida.

Tania Mesa – Directora de la Unidad de Nutrición y Enfermería Neolife

Alejandro Monzó – Unidad de Nutrición y Enfermería Neolife

Varios comportamientos o estilos de vida negativos tienen un impacto acumulativo

Tras ciertos abusos navideños, es interesante plantear nuevos objetivos que nos permitan llevar una vida saludable, como cuidar la alimentación, realizar ejercicio físico de manera constante, eliminar el tabaquismo y adoptar una actitud optimista frente a las dificultades que plantea la vida.

Un determinante clave de la salud de la población es el perfil de los estilos de vida de las personas. Un estudio publicado por Health Affairs (1), realizado por el director del Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica de Alemania, Mikko Myrskylä y por el profesor de gestión y políticas de salud de la Universidad de Michigan, Neil Mehta, analizó los datos de más de catorce mil individuos de Estados Unidos. Como resultado, encontró que personas no fumadoras, con un peso saludable y con un consumo moderado de alcohol vivían entre siete años o más que la población general.  Además, muestra que casi el 80% de los estadounidenses llega a los cincuenta años con unos malos hábitos: siendo fumadores, con altas tasas de obesidad, beben alcohol diariamente o tienen unos hábitos insanos en general.

Los investigadores observaron que cada uno de estos comportamientos poco saludables (obesidad, tabaquismo y consumo de alcohol) están relacionados directamente con una reducción de la esperanza de vida y una aparición más temprana de enfermedades, como por ejemplo enfermedades cardiovasculares, cáncer o diabetes, entre otras. Estos resultados nos proporcionan una visión objetiva de la importancia que representa tener un estilo de vida saludable y concienciarnos de ello.

Por otro lado, otro estudio también muestra resultados similares al anterior. Los investigadores de Hardvard Chan y colaboradores, realizaron un análisis exhaustivo del impacto de la adopción de factores de estilo de vida en la esperanza de vida en Estados Unidos (2).

Se analizaron datos de ochenta mil mujeres recopilados durante 34 años y datos de cuarenta y cuatro mil hombres durante 27 años. Los investigadores analizaron cinco factores de estilo de vida de bajo riesgo (no fumar, tener un índice de masa corporal en rangos de normalidad, realizar al menos 30 minutos o más al día de actividad física de moderada a intensa, consumo moderado de alcohol, mantener una dieta saludable) que podrían afectar a la mortalidad. Como resultado (fig.1), las mujeres que mantuvieron los cinco hábitos saludables ganaron, en promedio, 14 años de vida, y los hombres que lo hicieron ganaron 12 años, en comparación con los que no mantuvieron hábitos saludables.

Por consiguiente, ambos estudios subrayan la importancia de seguir hábitos de estilo de vida saludables para mejorar la longevidad y nuestra calidad de vida. Desgraciadamente, muchas veces la adherencia a adquirir estos hábitos es muy baja, ya sea por excusas, por falta de tiempo o motivación. Por ello, un nuevo año significa una nueva oportunidad, oportunidad que se traduce en iniciar el año con unos buenos hábitos saludables y así alargar nuestra esperanza de vida con mayor calidad.

Al iniciar este proceso, nuestros objetivos deben cumplir dos requisitos fundamentales para evitar fracasos: ser alcanzables y realistas. Nuestras recomendaciones y consejos para poder alcanzar vuestros objetivos son los siguientes:

• Volver a nuestra rutina y costumbres, alejados de los excesos de las fiestas navideñas.
• Tomar conciencia de que nuestra salud depende de nosotros mismos.
• Necesitamos tomar decisiones responsables, lo primordial es nuestra actitud.
• Debemos dedicar especial atención a nuestra alimentación. Somos lo que comemos, y una alimentación rica en alimentos de origen vegetal y pocos procesados es una pauta básica.
• Cualquier cambio saludable nos aportará beneficios.
• Retomar esa actividad física con la que disfrutábamos, o proponernos iniciar una nueva rutina de ejercicios, nos dará energía y vitalidad.
• Abandonar el hábito del tabaquismo y el consumo de alcohol.
• Es importante descansar bien, ya que la falta de sueño puede interferir mucho en nuestra rutina diaria.

Desde Neolife, nuestro objetivo fundamental es la prevención de enfermedades y la adquisición de este tipo de hábitos. Nos gustaría acompañarte en este recorrido para que puedas alcanzar tu mejor versión.

BIBLIOGRAFÍA

(1) Mehta N. & Myrskylä, M. (2017). “Los Beneficios para la salud de la población de un estilo de vida saludable: aumento de la esperanza de vida y retraso de la discapacidad”.Health Affairs, 36 (8). https://www.healthaffairs.org/doi/10.1377/hlthaff.2016.1569

(2) Li Y., Pan A., Wang DD., Liu X. y otros. (2018). “Impacto de los factores de estilo de vida saludable en las expectativas de vida en la población de EEUU”. Circulation 138: 345-355. https://www.ahajournals.org/doi/10.1161/CIRCULATIONAHA.117.032047