Neolife, en Vogue Fitness.
Como alega el equipo médico de la Clínica Neolife, «es importante centrarnos en conseguir un aporte suficiente de hidratos de carbono, el combustible que permita llevar a cabo el esfuerzo. Durante el día, debemos elegir alimentos ricos en hidratos complejos, absorción lenta, que nos aportarán energía gradualmente y nos ayudarán a mantener los niveles de azúcar en sangre.
Entre los carbohidratos complejos se encuentran, además de pasta, legumbres y patatas, avena, arroz integral, quinoa cocida o batata. Para el pre- y posentrenamiento, en cambio, interesa recurrir a fuentes ricas en hidratos simples o de absorción rápida, que suministrarán energía suficiente, se consumen durante la actividad, y no darán problemas con la báscula; y después, reponen las reservas de glucógeno muscular. Son las frutas, los cereales y las bebidas isotónicas».