Neolife, en Belleza Médica
Un aspecto físico armonioso pasa por la vigilancia de la salud y el control del envejecimiento acelerado. Corregir ciertas disfunciones hormonales puede mejorar nuestro aspecto, nuestro rendimiento y, además, alargar nuestra esperanza de vida. Nadie quiere convertirse en un anciano frágil de forma precoz, al menos si conoce los fundamentos de la medicina preventiva.
Tenemos que considerar edad, sexo, antecedentes, estilo de vida y objetivos de nuestros pacientes, por lo que realizamos un manejo completamente personalizado. Acuden a nosotros personas con interés por la prevención (aparentemente sanas) y, otras, con problemas declarados que no quieren resignarse a llevar esa “mochila” de limitaciones y dolencias.
Empezamos por un chequeo inicial, con el que vamos a establecer una serie de diagnósticos y damos un protagonismo especial a las hormonas, porque sabemos que el envejecimiento pasa por un deterioro del funcionamiento de nuestras glándulas. El descenso de los niveles hormonales se asocia con problemas y, a mayor edad, más riesgo de enfermedades metabólicas, cardiovasculares, neurodegenerativas, óseas, oncológicas, etc. Para llegar a los objetivos marcados apostaremos por la seguridad y eso significa trabajar en la búsqueda del equilibrio hormonal (terapia de reemplazo hormonal bioidéntico).