La supuesta terapia hormonal administrada al Rey Emérito para «rebajarle la líbido» tiene mucha leyenda y poca realidad

Neolife, en Confilegal.com
 
Poco o nada, si tenemos en cuenta la manera en la que el comisario de Policía jubilado, José Manuel Villarejo, relató el pasado jueves cómo supuestamente el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) inyectó al Rey Emérito «hormonas femeninas e inhibidores de testosterona para rebajarle la líbido». Porque era «un problema de Estado», relató a los diputados que conforman la Comisión del Congreso que investiga la «Operación Kitchen».
De acuerdo con el doctor Alfonso Galán, de Neolife, un reputado centro médico especializado en prolongar la longevidad mediante tratamientos de terapias hormonales, «en ambos casos dichas sustancias no se fabrican ‘ad hoc’ sino que existen y, además, se inyectan. Lo que haría prácticamente imposible su administración sin el consentimiento del paciente».
 
Para este experto, «este tipo de informaciones pertenecen más al ámbito de las leyenda que al de la realidad» […]