La salud de tu cerebro y la dieta mediterranea


La Dieta Mediterránea reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y atrofia cerebral.

Recientes estudios realizados en España y Estados Unidos demuestran que llevar una vida saludable siguiendo una alimentación equilibrada, donde predominen los alimentos de la Dieta Mediterránea, reduce el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular y de la atrofia cerebral relacionada con el envejecimiento.

Tania Mesa – Nutricionista y Enfermera de Neolife


Según un estudio realizado en España, la Dieta Mediterránea disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares como la cardiopatía isquémica y el ictus.

En España, el ictus es la tercera causa de mortalidad tras la cardiopatía isquémica y el cáncer, es la primera causa de discapacidad y la segunda de demencia tras el Alzheimer. Esto podría reducirse con un cambio en el estilo de vida de las personas: control del peso, de la tensión arterial, del azúcar y del colesterol en sangre, abandono del tabaco y del alcohol, realización de ejercicio de forma regular y una alimentación sana (como es la dieta mediterránea).

Se conoce como Dieta Mediterránea al patrón tradicional de alimentación de los países del área del Mediterráneo a mediados del siglo XX. Se caracteriza por un consumo elevado de verduras, legumbres, fruta, frutos secos, cereales integrales, ajo, cebolla y especias, un consumo moderado de pescado y aves de corral, el empleo de aceite de oliva virgen (tanto para cocinar como para aliñar), la ingestión de vino (consumido con moderación en las comidas) y una baja ingesta de grasas saturadas (incluidas la de los lácteos), carnes, productos cárnicos procesados y dulces.

Estudios previos clínicos y epidemiológicos han demostrando a lo largo de los últimos años los beneficios de la Dieta Mediterránea en la prevención secundaria de la enfermedad cardiovascular y más recientemente el estudio PREDIMED mostró el beneficio en la prevención primaria de la enfermedad cardiovascular.

El estudio PREDIMED (1) (Prevención con Dieta Mediterránea) es el mayor ensayo clínico realizado en España, donde participaron durante casi 5 años 7.447 hombres y mujeres de edades comprendidas entre los 55 y los 80 años de edad, considerados como sujetos de alto riesgo cardiovascular por tener en común diabetes mellitus tipo 2 o al menos tres de los siguientes factores de riesgo: hipertensión arterial, sobrepeso u obesidad, colesterol LDL elevado, niveles bajos de HDL o ser fumadores pero sin tener enfermedad cardiovascular al inicio del estudio.

Los participantes fueron asignados de forma aleatoria a uno de los dos grupos de la dieta mediterránea (una con suplementación de aceite de oliva virgen extra y otra con frutos secos) y otros a una dieta control (baja en grasa, con consejos para reducir la grasa dietética).

Dicho estudio demostró que aquellos sujetos que siguieron la Dieta Mediterránea disminuyeron el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares como la cardiopatía isquémica y el ictus.

La salud de tu cerebro y la dieta mediterranea
La salud de tu cerebro y la dieta mediterranea

Según otro estudio realizado en Estados Unidos, las personas mayores que siguen una dieta DASH (similar a la Dieta Mediterránea) tienen un mayor volumen de masa cerebral.

Las últimas Guías de la AHA (American Heart Association) y la American Stroke Association recomiendan la dieta DASH – “Dietary Approaches To Stop Hypertension”, que es una dieta similar a nuestra Dieta Mediterránea -, baja en sodio y rica en potasio, frutas y verduras, para la prevención primaria de accidentes cerebrovasculares (2).

Otro reciente estudio realizado por la Universidad de Columbia, en Nueva York, y presentado en el Encuentro Anual de la Academia Americana de Neurología el pasado mes de abril (3), confirma que las personas mayores que consumen una Dieta Mediterránea a lo largo de su vida tienen un mayor volumen de masa cerebral.

En el estudio participaron 647 personas mayores de 65 años que no tenían signos de demencia. El objetivo del estudio fue investigar una relación entre el consumo de alimentos de la Dieta Mediterránea y las medidas estructurales (volumen cerebral y espesor cortical) del cerebro, basándose en las imágenes de la resonancia magnética.

La adherencia de los participantes a la Dieta Mediterránea se midió a través de un cuestionario de frecuencia de alimentos acerca de la ingesta de pescado, verduras, frutas, legumbres, cereales, productos lácteos, carne, aves de corral y alcohol. Se evaluó el volumen intracraneal, el volumen cerebral total, el total de volumen de materia gris, el total de volumen de la materia blanca y el espesor cortical.

De los nueve componentes de alimentos, los resultados fueron:

  • El consumo elevado de pescado se asoció con un mayor volumen de materia gris y espesor cortical.
  • El bajo consumo de carne se asoció con mayor volumen cerebral total y volumen de materia gris.
  • Los participantes que tenían una dieta más Mediterránea tenían volúmenes cerebrales más grandes (tanto en materia gris como en blanca) equivalente a más de 1 año de envejecimiento.

Debemos considerar a la Dieta Mediterránea como un factor protector en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, distintos tipos de cáncer, ciertas enfermedades neurodegenerativas e incluso del propio proceso de envejecimiento.

En Neolife, clínica pionera en Medicina Antiaging, promovemos hábitos de vida saludables, fomentando el ejercicio físico, el control de los niveles hormonales y de estrés (obteniendo así un equilibrio hormonal), la alimentación basada en la Dieta Mediterránea y la toma de suplementos nutricionales (para cubrir el déficit de nuestra alimentación), así como favorecemos la mejora del descanso y el sueño. Es posible envejecer de forma saludable, manteniendo una calidad de vida óptima, a la vez que se consigue un aumento de la esperanza de vida. A través de nuestros programas antiaging conseguimos efectos tangibles sobre nuestra salud y sobre la prevención de enfermedades relacionadas con la edad.


BIBLIOGRAFÍA

  1. https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMoa1200303
  2. https://stroke.ahajournals.org/content/early/2014/10/28/STR.0000000000000046
  3. https://www.aan.com/conferences/2015-annual-meeting/