Nutri-Score: un semáforo nutricional con limitaciones


Los sistemas de etiquetado frontales de los envases caracterizan la calidad nutricional de los alimentos, pueden reducir el tiempo para procesar la comprensión de las etiquetas, ayudando a los consumidores a identificar opciones de alimentos más saludables.

En noviembre de 2018, el Ministerio de Sanidad de España notificó oficialmente la adopción del etiquetado nutricional Nutri-Score. En la teoría, tiene el objetivo de permitir a los consumidores juzgar fácilmente la calidad nutricional de los alimentos en el momento de la compra. Sin embargo, con el paso de los meses, en la práctica, diferentes limitaciones y desventajas han ido surgiendo, demostrando que se trata de una herramienta insuficiente para cumplir su objetivo.

Alejandro Monzó – Unidad de Nutrición y Enfermería Neolife


El Nutri-Score es un logotipo diseñado en base a la evidencia científica

El ambiente obesogénico se acuñó para describir una serie de factores que en el ambiente moderno contribuyen al aumento de peso corporal (1). Los factores incluyen la tecnología que permite ahorrar esfuerzo físico, los alimentos con alta densidad energética (generalmente alimentos industriales y procesados) de bajo coste, la dependencia de los automóviles, la comercialización de los productos, el poco tiempo que se tiene para preparar los alimentos en casa, una mayor presencia de restaurantes de comida rápida (fast foods), entre otros. Según el Ministerio de Sanidad, los niños españoles ven una media de 54 anuncios publicitarios al día (2). Muchos de ellos son de alimentos y no precisamente saludables (productos ricos en azúcar, sal y grasas saturadas), contribuyendo de igual modo a este ambiente citado y al comportamiento alimentario de ellos.

Como estrategias en el control del sobrepeso y la obesidad, es esencial promover la ingesta de alimentos ricos en nutrientes en el hogar y en las escuelas. Como apoyo desde la política estatal, en el año 2021 el Ministerio de Sanidad implementará el <<Nutri-Score>>, un etiquetado nutricional de tipo resumen de 5 colores, como sistema oficial de información nutricional recomendado para ser colocado en la parte frontal de los envases de los productos alimentarios (figura 1). En el marco de la salud pública, responde a varios objetivos (3): permitir a los consumidores juzgar, con un simple vistazo, la calidad nutricional de los alimentos y con ello tomar decisiones más saludables en el momento de la compra e incitar a la industria alimentaria a mejorar la composición nutricional de los alimentos que elaboran.

Los cinco niveles de Nutri-Score
Figura 1. Los 5 niveles del Nutri-Score (3)

El Nutri-Score es un logotipo de colores asociado a letras que describe 5 clases de calidad nutricional, que van del verde (asociado con la letra A) al naranja oscuro/rojo (asociado con la letra E) (3). Este sistema se basa en la atribución de puntos en función de la composición nutricional por 100 g o 100 ml del producto. Se tiene en cuenta el contenido de los nutrientes considerados como “desfavorables” o críticos desde el punto de vista nutricional (kilocalorías, azúcares simples, ácidos grasos saturados y sodio) y se tienen en cuenta los nutrientes o ingredientes considerados como “favorables” (proteínas, fibra dietética, porcentaje de frutas, verduras, leguminosas, frutos oleaginosos, aceites de oliva, nuez y colza) a los cuales se les atribuyen una puntuación (figura 2.). Esta puntuación final obtenida estará dentro del rango -15 a +40 y se clasifica el resultado en 5 categorías según la calidad nutricional (A/B/C/D/E).

calculo del algoritmo de Nutri-Score
Figura 2. Cálculo del algoritmo del Nutri-Score (3)

Como principales ventajas, el logotipo Nutri-Score ha sido validado a través de evidencias científicas sólidas, demostrando el interés que tiene su algoritmo sobre su relación con la salud (4). Ha demostrado su utilidad y eficacia para clasificar en función de su calidad nutricional, la inmensa mayoría de los productos que podemos encontrar en el mercado (4). Un estudio publicado en la Revista Española de Nutrición Comunitaria muestra que el Nutri-Score puede tener efectos positivos, donde se genera una mejora nutricional de 9,3% de la media de las cestas de la compra de los participantes (5). La gente, en definitiva, comprará menos productos etiquetados con la letra D (naranja) o E (rojo) y será la industria alimentaria la que deba reformular sus alimentos y productos para bajar los niveles de azúcar, sodio y mejorar la calidad de las grasas. Los autores señalan además que el Nutri-Score podría convertirse en una herramienta común, aplicable a los diferentes Estados miembros de Europa para mejorar la información nutricional que se facilita a los consumidores. Así pues, muchos alimentos industriales y ultraprocesados van a tener este tipo de puntuaciones y será fácil identificarlos.

Sin embargo, los autores y expertos son conscientes de que el sistema no es perfecto y se ha propuesto que se hagan ajustes para corregir esas limitaciones (4). Una de las desventajas es la ausencia de aditivos, ingredientes y el grado de procesamiento del producto en el algoritmo propuesto. Por otro lado, aplicando este sistema de etiquetado, el aceite de oliva es clasificado con la letra D y un refresco tipo light o edulcorado con la letra B.  A simple vista, la comparación nos da la percepción de que la bebida refrescante es más saludable que el aceite de oliva, una grasa que ha demostrado grandes beneficios para la salud (6,7).

El Nutri-Score tiene en cuenta las calorías por 100 g como parte de sus cálculos. Por esa razón, el aceite de oliva recibe una puntuación D y un refresco zero una B. Esta etiqueta tiene su interés para comparar productos de la misma categoría (como dos marcas diferentes de zumo), pero si se compara dos categorías diferentes (chocolates y cereales de desayuno) se obtienen conclusiones erróneas, donde el consumidor realizará todo tipo de comparaciones creando confusión, incluso siendo del mismo grupo de alimentos (figura 3) (8,9).

Nutri-Score
Figura 3. Valoración de tres lácteos según Nutri-Score (9)

Por ello, la mayor limitación del Nutri-Score es que se trata de un semáforo que habla principalmente de nutrientes y calorías. En base a ello, no es la misma grasa saturada contenida en un huevo que la de un cruasán, el azúcar no es el mismo en una fruta que en un zumo industrial o las calorías procedentes de unos frutos secos no son las mismas que las contenidas en una bolsa de patatas fritas (6,8,9). En definitiva, conocer la procedencia de las calorías del alimento es lo más importante, optando siempre por materias primas de calidad, alimentos frescos, locales y de temporada. Por ello, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la industria alimentaria puede desempeñar un papel importante en la promoción de una alimentación saludable del siguiente modo (10):

  • Reduciendo el contenido de grasa, azúcar y sal de los alimentos procesados.
  • Asegurando que las opciones saludables y nutritivas estén disponibles y sean asequibles para todos los consumidores.
  • Limitando la comercialización de alimentos ricos en azúcar, sal y grasas, sobre todo los alimentos destinados a los niños y a los adolescentes.
  • Garantizando la disponibilidad de opciones alimentarias saludables y apoyando la práctica de actividades físicas periódicas en el lugar de trabajo.

Finalmente, el exceso de energía es algo habitual en nuestro medio. Cuando se investiga la relación entre la disponibilidad alimentaria y la ingesta dietética, se evidencia el ambiente obesogénico, lo cual, sumado al sedentarismo, constituyen factores que conducen al sobrepeso, la obesidad y las comorbilidades asociadas. La prevención de estas afecciones radica en restringir el consumo de estos productos mediante políticas estatales, programas escolares y educación en los hogares, y estimular el de alimentos saludables ricos en nutrientes y la práctica de ejercicio físico.

En Neolife, elaboramos un plan de acción con nuestros pacientes para adoptar hábitos nutricionales y de estilo de vida saludables. Durante el asesoramiento nutricional personalizado, el paciente adquiere una educación nutricional óptima que le ayuda a realizar elecciones saludables durante su visita al mercado, interpretando de forma adecuada el etiquetado nutricional. De esta manera, se logra educar al paciente desde el conocimiento y, en definitiva, lograr salud y calidad de vida, disfrutando de los alimentos, siempre en un contexto de vida activa.


BIBLIOGRAFÍA

(1) David L. Katz, Rachel S. C. Friedman & Sean C. Lucan. (2015). “Nutrición Médica”. 3ª Ed. Wolters Kluwer Health, S.A.

(2) Manera, M. (2011). “Obesidad: ¿vivimos en un entorno obesogénico?”. Artículo Eroski Consumer.

URL:https://www.consumer.es/alimentacion/obesidad-vivimos-en-un-entorno-obesogenico.html

(3) Galan, P. y otros. (2019). “Nutri-Score: el logotipo frontal de información nutricional útil para la salud pública de España que se apoya sobre bases científicas”. Nutr. Hosp. Vol. 36(5):1213-1222.

URL:https://scielo.isciii.es/pdf/nh/v36n5/1699-5198-nh-36-05-01213.pdf

(4) Salas-Salvadó, J. & Babio, N. (2020). “¿Por qué hay que apoyar la implantación del etiquetado frontal de los envases Nutri-Score en España?”. IISPV, Hospital Universitari Sant Joan REUS y Universitat Rovira i Virgili.

URL:https://www.nutricio.urv.cat/media/upload/domain_1498/imatges/llibres/nutriescore2020_Juliol.pdf

(5) Galan, P. y otros. (2017). “El logotipo nutricional NutriScore en los envases de los alimentos puede ser una herramienta útil para los consumidores españoles”. Rev. Esp. Nutr. Comunitaria, 23(2).

URL:https://www.renc.es/imagenes/auxiliar/files/RENC_2017_2_07._Articulo_especial._Galan_P_et_al._Logotipo_NutriScore.pdf

(6) Revenga Frauca, J. (2020). “Nutri-Score: ¿un sistema para blanquear ultraprocesados?”. El Comidista. Diario El País.

URL: https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2020/07/27/articulo/1595861417_286035.html

(7) López Pevida, N. (2019). “Nutri-score, ¿las críticas tienen fundamento? Artículo Eroski Consumer.

URL: https://www.consumer.es/alimentacion/criticas-nutri-score-tienen-fundamento.html

(8) Carceller, R. (2018). “¿La coca-cola zero es más sana que el aceite de oliva? Errores del nuevo NutriScore”. Diario La Vanguardia.

URL: https://www.lavanguardia.com/comer/al-dia/20181114/452925908414/coca-cola-zero-aceite-oliva-nutriscore-sano-semaforo-alimentos.html

(9) Mateo, M. (2018). “Sanidad nos ofrece un <<semáforo de colores>> para elegir lo que comemos”. Oxocarbenio, divulgación científica.

URL: https://oxocarbenio.wordpress.com/2018/12/03/sanidad-ofrece-semaforo-de-colores-nutricional-elegir-comemos-alimentos/

(10) WHO. (2020). “Obesity and overweight: how can overweight and obesity be reduced”. World Health Organization.

URL: https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/obesity-and-overweight