Hoy me gustaría hablaros del NAD, una molécula importantísima que tenemos en nuestro organismo y de la que probablemente no hayáis oído hablar, al menos yo no la conocía como tal. El NAD, conocido como nicotinamida adenina dinucleótido, es un derivado de algo que ya nos suena más como es la Vitamina B3, también conocida como niacina, niacinamida o nicotinamida (forma soluble). El NAD se usa en más de 500 reacciones y tiene un papel crucial en el metabolismo, el envejecimiento celular, la reparación del ADN y la expresión de genes.

Esta molécula interviene de forma vital en dos vías importantísimas en el ser humano como son la vía de las sirtuinas y de PARPS, esenciales en funciones que tienen influencia en el proceso de envejecimiento como la síntesis de mitocondrias, la apoptosis, la autofagia, la inflamación, señalización intracelular y sistémica, reparación del ADN, la estabilidad genómica y la muerte celular programada.

El Dr. Alfonso Galán González, del Equipo Médico Neolife, una de las Clínicas más importantes de nuestro país especializada en Antienvejecimiento, nos habla de la relación que existe entre COVID, NAD e inmunidad.

La presencia de NAD en nuestro organismo es fundamental para protegernos de las patologías relacionadas con el envejecimiento.

Así de importante es el NAD. Ah! y sus niveles bajan según envejecemos. Como casi todo en nuestro organismo se trata de un equilibro entre producción y degradación, en este caso es simple, no solo se produce menos, sino que se degrada más.

Como explica el Dr. Galán, las sirtuinas son un grupo de 7 enzimas que regulan funciones que tienen influencia en el proceso de envejecimiento como la síntesis de mitocondrias, la apoptosis, la autofagia, la inflamación, señalización intracelular y sistémica, reparación de ADN, etc… se las ha venido a llamar los genes de la longevidad […]